09 de Septiembre, 2025 - Fruto de la Templanza

Fruto de la Templanza

09 de Septiembre, 2025

1 Corintios 9:25 “Y todo aquel que compite, se modera en todas las cosas. Ahora bien, ellos lo hacen para obtener una corona corruptible, pero nosotros, una incorruptible”.

Podemos ver en este versículo y en el anterior que el apóstol Pablo nos decía, por el Espíritu Santo, que si queremos terminar nuestra carrera con seriedad, debemos tener templanza en nuestra vida. Continúa comparándolo con obtener un premio o una corona en un evento deportivo. Para nosotros, la nuestra es una corona eterna que recibiremos en el tribunal de Cristo. Pablo nos dice, con mucha firmeza, en los versículos siguientes que tiene que mantener su cuerpo bajo control. En Romanos 12:1-2, Pablo nos dice que ofrezcamos nuestros cuerpos como sacrificio vivo al Señor; y en Romanos 8:13, nos dice que crucifiquemos nuestra carne para mantenerla bajo control. Está diciendo que el fruto de la templanza es necesario para mantener nuestra carne bajo control y poder terminar la carrera que se nos ha asignado. Este fruto parece ser muy importante cuanto más alto quieras llegar en Dios y cuanto más útil quieras ser para Él. Tito 2:1-2 dice: «Pero tú, habla lo que es conforme a la sana doctrina: que los ancianos sean sobrios, serios, moderados, sanos en la fe, en el amor, en la paciencia». La templanza está a la altura de la fe y el amor, si quieres ser utilizado por Dios. Y, por último, la templanza (el autocontrol) debe formar parte de tu vida. Debemos desarrollar la templanza en nuestras vidas si queremos mantener nuestra carne bajo control y ser capaces de terminar nuestra carrera con alegría.

Recuerda que la templanza (el autocontrol) consiste en refrenar las pasiones, los apetitos y los deseos. Cuando se vive con templanza, nunca hay excesos. Es bueno mantener siempre la carne bajo control, sin permitir que ocupe un lugar preeminente en tu vida. Los excesos de la carne nunca son buenos, pero estar lleno de Dios es lo mejor. Me encanta Efesios 5:18; nos dice que nunca nos embriaguemos con vino natural, con alcohol, sino que nos llenemos del Espíritu. A través del nuevo nacimiento y el caminar en el Espíritu, podemos deshacernos de los excesos en todas las áreas de nuestra vida. Lo que tenemos que decidir, si queremos terminar nuestra carrera, es abrazar el fruto de la templanza para no terminar al margen con nuestra fe naufragada, como advirtió Pablo por el Espíritu Santo. Debemos comprender y tomar en serio esta advertencia y ser templados en todas las cosas. La templanza sólo se refiere a la moderación cuando se trata de cosas buenas. La mayoría de la gente utiliza mal esta palabra y la aplica a todas las cosas porque la templanza se tradujo como moderación en Filipenses 4:5, pero se trata de una mala traducción. En ese versículo, debería haberse traducido como bondad fraternal en lugar de moderación, porque la moderación nunca se aplica al pecado. No está diciendo que el pecado con moderación está bien siempre y cuando no te domine. En este caso, la templanza consiste en tener un control total sobre tu carne y mantenerla sometida para que no peque.

Pr. Mark Garver

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