19 de Febrero, 2025 - Se rápido para arrepentirte

Se rápido para arrepentirte

19 de Febrero, 2025

Hechos 8:22 “Arrepiéntete, pues, de esta tu maldad, y ruega a Dios, si quizá te sea perdonado el pensamiento de tu corazón.”

Esto se refiere a Simón el Hechicero quien nació de nuevo y fue bautizado en agua (Versículo 13). Simón estaba intrigado por las señales y maravillas hechas por Felipe, el evangelista, que habían hecho que él y toda la ciudad se volvieran a Dios, se salvaran y se bautizaran. Simón empezó a seguir a Felipe a todas partes debido a estas señales y prodigios.

Cuando Pedro y Juan bajaron para ayudar a Felipe a que la gente fuera llena del Espíritu Santo, Simón se metió en un buen lío ofreciendo dinero a los apóstoles por poder imponer las manos sobre la gente y ver el poder. Simón había vuelto a sus viejas costumbres, pensando que podía comprar el poder de Dios en lugar de darse cuenta de que ahora que era un creyente, él también tenía esta capacidad de administrar el poder de Dios. Había algo del viejo hombre todavía en Simon, quizás porque no había tenido tiempo de renovar su mente y deshacerse de ese tipo de pensamiento. El punto es que, la Palabra dice que él debe arrepentirse. ¿Arrepentirse de qué? De la maldad que todavía había en su corazón. Simón necesitaba el perdón de Dios y la única manera de que eso sucediera era a través del arrepentimiento de Simón. Ten cuidado hoy cuando escuches a la gente decir: «Como creyente, ya no se requiere que te arrepientas si caes en pecado». Esto no es bíblico.

Cuando sabemos que hemos pecado o cuando el pecado nos ha sido señalado por la Palabra de Dios, o por el Espíritu Santo, o por alguien sobre nosotros en el Señor, o alguien cercano a nosotros, necesitamos estar verdaderamente arrepentidos ante Dios y arrepentirnos. Simón nació de nuevo, pero la maldad fue encontrada en su corazón, por lo que necesitaba arrepentirse de ello. A medida que crecemos en Dios y renovamos nuestras mentes y cambiamos nuestro carácter para que coincida con el carácter de Dios, habrá errores y pecados en el camino de los que tendremos que arrepentirnos. No pienses en ello como un fracaso cuando tengas que arrepentirte, más bien piensa en ello como crecimiento. El fracaso sólo viene cuando no nos arrepentimos porque ese pecado nos llevará a la muerte. No sé si Simón llegó a arrepentirse. La Palabra continúa diciendo que Simón estaba lleno de celos amargos porque estaba acostumbrado a ser el líder espiritual de esta gente. Simón le pidió a Pedro que orara a Dios por él para que no le pasara nada, pero no sé si eso fue suficiente porque Simón tenía un problema con el que tenía que lidiar. Confío en que como Simón había nacido de nuevo, y probablemente estaba lleno del Espíritu, pudo arrepentirse y ser usado por Dios en lugar del diablo. El arrepentimiento es un regalo para cada creyente nacido de nuevo. Sin ese regalo estaríamos atrapados en el pecado que cometimos.

Pr. Mark Garver