25 de Agosto, 2025 - Jesús en el madero

Jesús en el madero

25 de Agosto, 2025

Juan 3:14 “Y así como Moisés levantó la serpiente de bronce en un mástil en el desierto, así también el Hijo del Hombre debe ser levantado”.(NTV)

Jesús continuó hablando en los capítulos 8 y 12 del Evangelio de Juan sobre ser levantado, lo cual es una referencia a su crucifixión en la cruz y a su elevación desde la Tierra. Vemos que Jesús hace referencia a lo que hizo Moisés durante la invasión de las serpientes venenosas en el desierto que mordían a los hijos de Israel, y que morían por miles. Cuando los hijos de Israel miraban fijamente a la serpiente en el poste, que es un tipo de Cristo en la cruz, eran sanados. Era la única manera de liberarse del veneno si eran mordidos, ya que no había otra cura disponible para ellos. Jesús se convirtió en pecado. No solo tomó nuestro pecado. Él, que no conoció pecado, se convirtió en pecado para que nosotros fuéramos hechos justicia de Dios en Cristo Jesús (2 Corintios 5:21). Nuestra única cura para el pecado es Jesús. Él es el único que puede salvarnos de nuestro pecado y de la muerte que el pecado siempre causa. Mientras Jesús se convertía en nuestro pecado, también tomó sobre sí todas las enfermedades y dolencias; y se nos dice que por las heridas que recibió en el poste de azotes, somos sanados (1 Pedro 2:24). Mientras Jesús estaba en la cruz, se convirtió en maldición para que las bendiciones de Abraham vinieran sobre nosotros por la fe (Gálatas 3:13-14). Porque Jesús fue levantado, como la serpiente en el poste, tú y yo podemos ser libres del pecado y de la muerte que este causa; tú y yo podemos ser libres de todas las enfermedades y dolencias que acosan a la humanidad. Sin embargo, la clave es tener una mirada fija, primero en una cruz vacía, recordando la obra que Jesús realizó en la cruz y luego, mirando a la diestra del Padre Celestial, donde está sentado un Jesús victorioso. Cuando ponemos nuestro afecto en nuestro Salvador resucitado, todo lo que Él ha hecho por nosotros se pone a nuestra disposición. No dejes que nada de lo que Jesús hizo por ti en la cruz se pierda, sin ser recibido. Por último, tú y yo hemos recibido una tarea de aquel que colgó en esa cruz, como la serpiente en el poste. Jesús quiere que proclamemos lo que ha hecho a todos los que quieran escuchar. Quiere que los salvemos y luego los llevemos al lugar donde puedan ser discipulados y caminar en la verdad de la Palabra de Dios, que los liberará y los mantendrá libres.

Pr. Mark Garver